Orfeo era un chico muy callejero, actuaba en bares de noche y como mucho en algunas fiestas de cumpleaños pero siempre lo acababan echando por que decía cosas groseras. Vivía solo en un barrio de gente mayoritariamente pobre, el barrio se llamaba Liornes al norte de Italia.
Un día le llamo una chica llamada Eurídice, era la dueña del bar Mitos, resultaba que la noche anterior la había visto actuar y le entusiasmó su manera de decir las cosas y con el sentimiento con lo que las decía. El día siguiente fue a visitarla al bar, estuvieron muchas horas hablando y conversando hasta que llegó la hora de actuar. Al acabar la noche mucha gente le pedía autógrafos por que le había gustado mucho. Eurídice también quedó impresionada pero ella en lugar de pedirle un autógrafo fue al grano y le invitó a toma-se una copa en su casa. Bueno lo que pasó esa noche os lo podéis imaginar por que le hizo un contrato fijo y le buscó a un representante.
Pasaron los años y Orfeo fue dejando a un lado la música y concentrandose mas en Eurídice. Un dia a ella le diagnosticaron un cáncer de pulmón, no era muy grabe pero su cuerpo no aguantó y murió sin poder despedir-se de Orfeo.
Orfeo dolido prometió que se despediría de ella una última vez asi que fue al lugar de su muerte (al hospital) y la busco por todas partes hasta encontrar a su alma perdida. Habló con ella y le prometió que no dejaría la música por ella y después se marcho.
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